No al despilfarro de alimentos. Es mejor para el Planeta

El despilfarro de alimentos ha adquirido unas dimensiones tales, que debe considerarse un problema de alcance mundial que afecta a todos los eslabones de la cadena agroalimentaria, desde el campo hasta la mesa de los consumidores.

El desperdicio de alimentos tiene un impacto en la pobreza y el hambre en el mundo, en el aumento de la contaminación ambiental y en el agotamiento de valiosos recursos naturales.

El desecho de alimentos es un problema global que tiene efectos negativos para el ser humano y el medio ambiente, así como consecuencias económicas.

En España desperdiciamos 7.7 millones de toneladas de alimentos al año según estimaciones de la Comisión La Unión Europea que ha establecido como objetivo reducir el desperdicio alimentario un 50 por 100 de aquí al 2025.

Y las empresas y los consumidores podemos hacer mucho.  Estas son algunas de las recomendaciones que según la FAO debemos tener en cuanta:

  • Apoyemos la oferta de las tiendas minoristas que ofrezcan más variedad de productos frescos que no sigan estrictos estándares estéticos, esto  puede ayudar a que no desechemos tantos alimentos.
  • El gran desperdicio en hogares es consecuencia de acumular más alimentos de los que va a ser posible consumir.  Modificar esta tendencia adecuando la compra a las necesidades diarias, reduciría considerablemente el desperdicio alimentario.
  • Se deben revisar las fechas de consumo de los alimentos, e intentar consumirlas o donarlas  antes de que lleguen a su límite.
  • Antes de considerar la necesidad de aumentar producción de alimentos para satisfacer las futuras demandas mundiales, pensemos en no desperdiciarlos y en todo el esfuerzo y energía empleada en vano en los alimentos que tiramos.
  • En alimentos frescos o listos para el consumo valora si es necesario el paquete grande, o las ofertas “dos por uno”, quizá sea demasiada comida y termine desperdiciada.
  • En un restaurante o celebración con bufé libre tengamos presente la mesura al servirnos, lo que nos sobre en el plato irá directo al  vertedero.
  • Cuando desechamos los alimentos, hemos de pensar también en los recursos malgastados en su elaboración, en el transporte, la energía desperdiciada en su refrigeración y cocción, y la producción de metano en su descomposición en el vertedero.
  • Aprovechar la comida sólo significa pensar antes de tirar. Es una forma inteligente de ahorrar y reducir nuestra huella alimentaria (ó “Piensa,  ahorra y reduce al mínimo tu huella alimentaria”)
  • ¡Dona los alimentos que no vayas a aprovechar! Refugios, bancos de alimentos y otras instituciones pueden darles un buen uso antes de que se estropeen.
  • España cuenta con 56 bancos y el último año las donaciones alcanzaron las 104 millones de Kg.  Es un buen dato,  si conseguimos minimizar el desperdicio puede mejorar aún más.
  • En la lucha contra el despilfarro de alimentos hay que actuar en cada una de las fases de la producción y distribución de alimentos, pero el resultado final sería poco significativo si los consumidores siguen desperdiciando a los niveles actuales.

Si te ha gustado comparte y ayudarás al Planeta ¡Gracias!